En muchas ocasiones, la vida nos depara cosas inesperadas, y es en los momentos más absurdos donde te das cuenta que ningún momento vale tanto la pena como el presente; pero no todo momento que ha cedido su lugar a ser un recuerdo más en el pasado puede ser tan grandioso como uno quisiera, todos hemos vivido un momento de alegría el cual a pesar de perdurar en el tiempo unos segundos, queda marcado por la eternidad en nuestras memorias, pero así como encontramos felicidad, podemos estar atrapados en un momento de desdicha, de tristeza, de enojo, momentos que inyectan en el corazón sufrimiento que dependiendo el motivo podrán solo rasgarlo o en su defecto atravesarlo, pero los malos momentos no siempre guardan desdicha por completo, al contrario estamos aquí para engrandecer aquellos recuerdos en los que la angustia, la desesperación, la ansiedad, y miles de sentimientos negativos se apoderan de nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra alma y aquí es donde se preguntaran el porqué de engrandecer estos sentimientos que solo creemos ocasionan dolor, confusión, nos deprimen, nos hacen llorar, emociones que queremos dejar de lado, y he aquí el porqué de estas palabras, aquellos momentos tan difíciles por más pequeños que sean, pueden ocasionar en nosotros un cambio total en nuestras vidas cuando estamos del todo decididos a hacer algo al respecto.
Tomemos para efectos practicos como ejemplo la tristeza ocasionada por las rupturas amorosas con aquellas personas tan especiales que sucedieron a lo largo de nuestra vida yque muy seguro con alguno creíamos pasaríamos hasta el último día en la tierra, el amor puede ser algo muy doloroso, alguna vez lo hemos vivido todos, pero el hecho de hacer algo para salir de esta etapa de nuestras vidas donde todo pareciera derrumbarse puede ocasionar algo tan horrible como lo es el conocerse a uno mismo, algo a lo que le huimos por temor de ver nuestro interior sin darnos cuenta de que podemos encontrar nuevas formas de amar y por fin dejar ir, encontrar paz en nuestro corazón que poco a poco va sanando; el decidir hacer un cambio en nuestras vidas gracias al momento de ansiedad que pasamos por unos minutos, puede cambiar nuestras vidas como no podemos imaginarlo, y es que sea cual sea la dificultad por la que uno pasa en su propio momento presente puede hacer que el simple arrebato de un corte de cabello en una noche de primavera a las tres de la mañana sea lo único que necesite tu corazón, tu mente y tu alma para estar en paz, porque debemos recordar que el tiempo no espera, no perdona, no se detiene nunca, así que córtate el cabello aunque sean las tres de la mañana….
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